Antes de empezar
- Saca todos los ingredientes de la nevera una o dos horas antes, para que estén a temperatura ambiente cuando vayas a preparar la tarta.
- Prepara la mermelada casera previamente, te dejo la receta al final del post. También puedes hacerla con mermelada comprada, e incluso poner otra que te guste más, de frambuesa, de arándanos…
- Cubre bien el molde en el que vayas a hornear la tarta, con papel aluminio, para eviatr que se filtre el agua ya que se cuece al baño maría.
- Cuando la vayas a consumir, si la tienes refrigerada, te aconsejo que la saque al menos una hora antes, para que recupere esa textura cremosa que la caracteriza.
Ingredientes
-Base-
80 gr de galletas (las que más te gusten)
17gr de almendras crudas
30 gr de cacahuetes crudos
65 gr de mantequilla derretida
-Relleno-
– 250 gr de queso mascarpone
– 225 gr de queso crema
– 80 gr de azúcar
– 1 cda de zumo de limón
– 1 cdita de extracto de vainilla
– 12 gr de harina
– 2 huevos
– Mermelada de fresa (comprada o casera -receta al final del post)
Así se prepara la tarta de queso mascarpone con mermelada de fresa
Precalienta el horno a 175º C. Mientras, en un procesador de alimentos o una picadura, tritura las almendras, los cacahuetes y las galletas. Mezcla con la mantequilla derretida hasta formar una pasta homogénea -sí del queda algo seca la mezcla puedes añadir un poquito más de mantequilla.
En un molde redondo de 20 cm, previamente engrasado, forra la base y los laterales con papel sulfurizado -para los laterales corta tiras algo más anchas que las paredes del molde y ponlas alrededor. Vierte la mezcla de las galletas y extiéndela, con ayuda de una cuchara o la base de un vaso, por todo la base, intentando subir un poquito por los laterales.
Hornea 8 o 10 minutos y deja enfriar mientras preparas el relleno. Baja la temperatura del horno a 165 º C.
Mientras prepara el relleno…
Bate a velocidad baja los dos tipos de queso. Aumenta la velocidad para conseguir una mezcla cremosa. Añade el azúcar y la harina, previamente tamizados, y bate a velocidad media.
Incorpora el zumo de limón y la vainilla, y sigue batiendo. Por último, añade los huevos uno a uno, sin incorporar el siguiente hasta que el anterior esté totalmente integrado.
Forra el molde con papel de aluminio. Pon varias capas para evitar que se filtre el agua. Añade la mezcla del relleno al molde, y da unos golpecito para quitar las posibles burbujas.
Ahora es el momento de añadir nuestra mermelada de fresas, puedes ponerla ya comprada o hacerla tú en casa con la receta que te dejo bajo estas líneas. Con una cuchara pon gotitas de mermelada por toda la superficie y con la punta de un cuchillo rómpelas para mezclarlas con la crema de queso. Crearás un dibujo súper chulo.
Prepara una fuente apta para horno en la que puedas meter el molde. Pon el molde dentro y vierte agua caliente en la bandeja hasta cubrirle aproximadamente un dedo.
Hornea unos 60 minutos. Pasado este tiempo, abre la puerta del horno y deja que la tarta repose dentro unos 30 minutos.
90 minutos después…
Saca la tarta de queso mascarpone del horno y deja que se enfríe totalmente sobre una rejilla. Refrigera o tómate una porción de esta maravilla para todos los sentidos. ¡Espero que te guste y que me cuentes para quién o quiénes la has preparado! A continuación, te dejo la receta para preparar la mermelada de fresa, por si te apetece hacerla.
Receta de mermelada de fresa casera
Ingredientes
– 350 gr de fresas congeladas
– 1/2 cda de azúcar
– 1 cda de agua
– 2 cditas de maizena
En un cazo, a fuego lento, pon las fresas, el agua, el azúcar y la maizena. Cuando las fresas estén blandas, pasa a una batidora y tritura la mezcla. Vuelve a ponerla en el cazo y cocina a fuego lento hasta que tome un color más oscuro. Pásalo por un colador y ¡lista! Ya tienes tu mermelada casera, baja en azúcar.