Después de unos meses sin encender el horno, vuelvo con una nueva y deliciosa receta ideal para cuando tienes visita, para desayunar o para la merienda de los más pequeños de la casa. En esta ocasión, he sustituido el azúcar de caña por el de coco, con un índice glucémico más bajo, perfecta para sustituir en tus postres.
Con esta receta, también puedes hacer unos cup cakes, un bizcocho sin crema ni relleno o una tarta de morir de amor, para cualquier evento, completamente cubierta de crema. ¡Vamos allá con los ingredientes!
Ingredientes
Bizcochos
3oo gr de harina todo uso
200 gr de azúcar de coco
240 gr de zanahoria rallada
1 cdita de extracto de vainilla
1/2 cdita de sal
2 cditas de bicarbonato
2 cditas de polvo de hornear
Ralladura de un limón
200 ml de aceite de oliva suave
2 huevos
1 cdita de canela
100 gr de nueces picadas
50 g de fruta deshidratada picada
Crema de queso
120 gr de mantequilla
300 gr de azúcar glass
300 gr de queso philadelphia
1 cucharada de leche semidesnatada
Preparación de la tarta fácil de zanahoria
Comenzamos precalentando el horno a 170º. Mientras, vamos a batir el azúcar de coco con los huevos hasta que se integren y empiecen a espumar ligeramente. A continuación, añadimos el aceite y batimos, de nuevo, unos dos o tres minutos a velocidad media. Agregamos también el extracto de vainilla, y mezclamos.
Ahora vamos a hacer que nuestra mezcla adquiera consistencia, y para ello le añadimos la mezcla de la harina, el polvo de hornear, la sal, el bicarbonato y la sal, bien tamizada. Te aconsejo que los ingredientes secos los tamices, siempre que se requiera, antes de comenzar a hacer la receta. Pero también puedes hacerlo en el momento sobre el bol en el que se estén preparando. Batimos esta mezcla hasta conseguir una masa homogénea, a la que vamos a terminar añadiéndole la zanahoria rayada, las nueces y la fruta deshidratada, cortada en trocitos, no demasiado pequeños para que te los encuentres una vez horneada, y seguimos mezclando.
¡Es hora de hornear! Engrasamos dos moldes de 20 cm y los forramos con papel sulfurizado en la base. Dividimos la masa en dos partes iguales y la echamos en cada uno de ellos. Horneamos a 170º, o 160º depende del horno, unos 25 o 30 minutos. Pasado ese tiempo, pinchamos con un palillo los bizcochos para comprobar que están en su punto. Los sacamos y los dejamos enfriar sobre una rejilla unos 20 minutos.
Mientras se enfriar totalmente, vamos a preparar la crema de queso. Para ello, en una batidora mezclamos el azúcar glass, con la mantequilla -que habremos sacado de la nevera unos 15 minutos antes- y la leche. Batimos a velocidad baja y vamos aumentándola poco a poco para evitar que todo se llene de azúcar. Cuando tengamos una mezcla homogénea, sin grumos, añadimos el queso crema recién sacado de la nevera.
Para montar nuestra tarta fácil de zanahoria, vamos a igualar la parte superior de los bizcochos para que quede bien ajustado. Ponemos uno de los dos bizcochos en un plato giratorio o en uno normal si no tenéis otro. Colocamos dos o tres cucharadas, yo uso la de los helados, y extendemos la crema con la ayuda de una espátula. Colocamos el segundo bizcocho y repartimos una cantidad generosa de crema y la repartimos por la parte superior de la tarta, y los laterales si quieres. ¿Verdad, que no te puedes resistir a probarla?